Introducción

El sector agroalimentario español, responsable de aproximadamente el 10% del PIB y generador de más de 2,4 millones de empleos directos e indirectos, enfrenta un panorama desafiante. Problemas estructurales como la baja digitalización, la presión por la sostenibilidad, los márgenes de beneficio ajustados y las dificultades de acceso a la financiación afectan especialmente a las pequeñas y medianas empresas (PYMEs), que representan el 95% del tejido empresarial agroalimentario español.

En este contexto, el reciente lanzamiento del Impact Bridge Sustainable AgriFood Fund I Innvierte, FCR (IB SAF I), un fondo de capital privado con un objetivo de 150 millones de euros, promete impulsar la transformación sostenible del sector. Sin embargo, surgen dudas sobre si sus beneficios tendrán un impacto significativo en el tejido empresarial en su conjunto.

Participantes Clave y sus Objetivos

Diversas entidades públicas y privadas han unido fuerzas en esta iniciativa:

1. Centro para el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (CDTI Innovación)

El CDTI, a través del programa Innvierte Economía Sostenible, aporta 73,5 millones de euros. Su objetivo principal es impulsar la capitalización de empresas tecnológicas o innovadoras en el sector agroalimentario.

2. Fondo Europeo de Inversiones (FEI)

Con una inversión de 30 millones de euros, el FEI busca fomentar la sostenibilidad en los sistemas agroalimentarios europeos, alineándose con los objetivos climáticos de la Unión Europea.

3. CaixaBank y Tikehau Capital

Ambas entidades aportan 10 millones y 5 millones de euros respectivamente, con el compromiso de reforzar la sostenibilidad e incentivar prácticas de agricultura regenerativa en el sector.

4. Impact Bridge Asset Management

Como gestora del fondo, cuenta con más de 300 millones de euros bajo su supervisión y un equipo especializado liderado por Carlos de Abajo y Fernando Sanz-Pastor.

Análisis Crítico: Positivos y Negativos del Fondo

Aspectos Positivos

Impulso Financiero para Empresas de Alto Potencial

Este fondo está diseñado para apoyar a empresas innovadoras con alto potencial de crecimiento, con la intención de convertirlas en referentes en sostenibilidad y eficiencia dentro del sector. El acceso a capital flexible permite a estas empresas escalar sus operaciones y desarrollar nuevas tecnologías.

Incentivo a la Innovación Sostenible

El fondo prioriza proyectos que generen impactos ambientales y sociales positivos, desde la reducción de emisiones de carbono hasta la promoción de la agricultura regenerativa. Además, establece mecanismos de seguimiento de resultados, vinculando la retribución de la gestora a la consecución de estos objetivos.

Efecto Catalizador en la Inversión Institucional

La participación de entidades como el CDTI, el FEI y CaixaBank refuerza la confianza en el sector agroalimentario, lo que podría atraer futuras inversiones públicas y privadas.

Aspectos Negativos

Escaso Alcance en un Tejido Empresarial Amplio

El fondo planea beneficiar a solo 10-12 empresas. Considerando que hay más de 30.000 empresas agroalimentarias en España, su impacto directo será limitado. Las microempresas y explotaciones familiares, que conforman la mayor parte del sector, probablemente quedarán fuera.

Incremento de la Brecha entre Grandes y Pequeñas Empresas

Es probable que las empresas medianas o con mayor capacidad de innovación sean las principales beneficiarias, ampliando la desigualdad entre las grandes compañías y las pequeñas explotaciones familiares que ya enfrentan limitaciones financieras y tecnológicas.

Falta de Enfoque en el Desarrollo Rural

El fondo no parece considerar medidas específicas para fortalecer las zonas rurales, donde el acceso a recursos financieros y tecnológicos es más limitado. Esto podría ampliar las brechas territoriales en el acceso a la innovación y el desarrollo sostenible.

Las Necesidades Reales del Sector Agroalimentario Español

Si bien el Impact Bridge Sustainable AgriFood Fund I aborda la necesidad de fomentar la sostenibilidad en el sector, las pymes y pequeñas explotaciones familiares requieren un apoyo financiero más inclusivo. Las prioridades deberían centrarse en:

  • Fomentar programas de digitalización accesible para pequeñas explotaciones.
  • Incentivar la innovación colaborativa entre empresas grandes y pequeñas.
  • Promover subvenciones directas que respalden a las zonas rurales.
  • Facilitar la creación de consorcios o clústeres de empresas agroalimentarias para impulsar proyectos de I+D a gran escala.

Conclusión

El lanzamiento del Impact Bridge Sustainable AgriFood Fund I marca un avance significativo hacia la modernización y sostenibilidad del sector agroalimentario en España. No obstante, su impacto directo se limitará a un pequeño grupo de empresas con alto potencial de crecimiento.

Aunque el fondo podría actuar como catalizador para futuras inversiones y establecer un modelo de referencia, sus beneficios serán insuficientes para abordar los problemas estructurales que afectan al conjunto del tejido empresarial agroalimentario español. La necesidad de estrategias más inclusivas y adaptadas a las pequeñas empresas sigue siendo un desafío pendiente para el futuro del sector.

Fuentes